En su paso por Buenos Aires, con motivo del evento organizado por Netflix, el actor de origen costarricense, y actual protagonista de “Shadowhunters”, nos contó cómo fue formar parte de la más reciente película original de la plataforma y cómo su experiencia como bailarín le sirvió a la hora de realizar las coreografías de artes marciales

Por María Gabriela Losino

En su paso por Buenos Aires, con motivo del evento promocional organizado por Netflix, entrevistamos a Harry Shum Jr, a quien muchos jóvenes reconocerán por su participación en la serie “Glee” (2009-2015).

Netflix - Harry Shum Jr - Crouching Tiger Hidden Dragon Sword of Destiny - Shadowhunters

El actor de origen costarricense, de 33 años, nos contó cómo fue formar parte de “Crouching Tiger, Hidden Dragon: Sword of Destiny”, la más reciente película original de la plataforma (se estrenó el 26 de Ferbrero) y cómo su experiencia como bailarín le sirvió a la hora de realizar las coreografías de artes marciales.

Me imagino que el cambio de género entre una serie musical como “Glee”, de la que formaste parte durante seis temporadas, y esta película de artes marciales fue importante ¿no?

-Sí. Muuuuy.

¿Y cómo describís ese cambio?

-Fue… (se queda pensando) fue muy diferente. Es que son dos cosas completamente distintas. Viniendo de un show de TV como “Glee”, a la hora encarar un proyecto nuevo, especialmente de un género como éste, uno trata de separar lo más posible. Aunque no podés evitar sentirte influenciado con ciertas cosas o elementos. Quiero decir, en esta película no hay ni bailes ni canciones pero siento que para mí el esfuerzo de realizar algo totalmente diferente fue inconsciente. Me gustó mucho la historia y el poder trabajar con el director Woo-Ping Yuen, con Donnie Yen y Michelle Yeoh. Pero principalmente me encantó ser un héroe de las artes marciales. Disfruté muchísimo el proceso de realización.

¿Encontrás un paralelismo entre el baile y las artes marciales?

-¡Sí! ¡Por supuesto! Michelle Yeoh fue bailarina en su momento y se convirtió en una excelente heroína de este género. Creo que hay una conexión entre ambos porque uno tiene que hacer las coreografías de lucha con gracia y fluidez, lo cual pude lograr gracias a mi experiencia como bailarín.

¿Cómo fue la experiencia de trabajar con Netflix?

-Fue grandioso. Para mí, la parte más genial fue que el mundo entero pudo ver la película al mismo tiempo porque se estrenó de manera mundial. A este nivel, no he visto un proyecto que haya hecho eso. Me encanta el hecho de que una persona, ya sea en Corea, o de aquí de Buenos Aires, Argentina, pueda compartir la conexión y discutir sobre la historia, si le gustó, etc… Es muy cool.

¿Habías visto la película original antes de unirte al proyecto?

-¡Sí! Recuerdo haberla visto con mis amigos de la escuela secundaria. Esos mismos amigos, son los que me acompañaron al estreno de esta segunda entrega de “El Tigre y el Dragón” y el hecho de que me vieran en la pantalla grande fue simplemente genial porque la película se estrenó hace 15 años y fue muy significativa en aquel momento porque fue la que introdujo el género Wǔxiá (propio de la cultura China) en países extranjeros, en lugares donde generalmente no se veían films de artes marciales. La original marcó diferencia porque también tenía una historia de amor y en esta secuela, debido a la influencia que ha habido durante todos estos años entre las distintas culturas, podés notar que hay cierta influencia del western, combinado con una historia romántica y elementos de fantasía. Eso me gustó mucho.

¿Qué tan diferente es el trabajo para una serie y para una película?

-Los ritmos de una u otra son muy diferentes. Una serie es como una pequeña película de una hora que grabas en 10 días a razón de 5 o 6 escenas por jornada. Y una película, más o menos de 1 hora y media, la filmás en tres o cuatro meses y hacés una escena por día. La parte más loca con series como “Glee” o incluso “Shadowhunters” son los tiempos que tenés para ensayar. En televisión, a veces tenés tres horas para ensayar toda la secuencia de una escena; en cambio en las películas disponés de mucho más. Para “Crouching…” tuve cuatro semanas para entrenar y creo que allí reside una de las grandes diferencias entre ambos formatos.

Sobre eso te iba a preguntar… ¿Cómo fue el entrenamiento para interpretar a Wei Fang? Me encantaron las escenas de lucha…

-Entrené siete u ocho horas diarias, más o menos, en el arte del Wǔxiá y en el trabajo con cables. Y continué entrenando mientras filmábamos. A pesar de que mi cuerpo me odiaba, yo lo disfruté mucho (risas). ¡Había momentos en que necesitaba un baño con hielo! Te sentís vivo porque empujas los límites físicos, mentales y emocionales.

¿Te interesan las opiniones del público en las redes sociales?

-Sí, suelo leer los comentarios que me dejan en mi cuenta en Tumblr. La mayoría son positivos pero suele pasar que cuando recibo uno negativo me enfoco en ese y no dejo de pensar en ello (risas). ¡Ni siquiera puedo dormir! (más risas) Es subjetivo. La gente va a tener buenas o malas opiniones… es decir… opiniones en general. La reacción de cada persona es diferente. Nosotros hacemos nuestro trabajo y dejamos que el publico decida si le gustó o no.

¿Te gusta formar parte de “Shadowhunters”? ¿Te gusta el género de fantasía?

-¡Sí, me encanta Magnus Bane! Mi personaje es un brujo de 400 años, poderoso y sabio, pero al mismo tiempo muy compasivo. Me encanta el maquillaje y el colorido vestuario que utiliza y que encaja con su personalidad. Es divertido. Si bien se nos permite bastante improvisación, Magnus está brillantemente escrito por los guionistas. Estoy entusiasmado por grabar la segunda temporada en Mayo.

¿Cuánto hace que estuviste en Costa Rica?

-Fue hace tres meses. En Noviembre me casé (NdR: con la actriz Shelby Rabara).

¡Felicitaciones!

-¡Gracias! Fue grandioso porque volví a Puerto Limón, donde me crié hasta los 4 años. Y es importante tener en claro las raíces… aunque lo poco que hablo en español quedó en Costa Rica, porque tuve que aprender chino e inglés. Fue maravilloso que mi esposa viera dónde crecí.

Desarrollás un sitio web sobre tecnología ¿verdad?

– Sí, tenthandfourth.com

¿Cómo surgió el proyecto?

-Soy un nerd. Me encanta la tecnología y pienso que mejora nuestras vidas aunque a veces no sea así y estemos desconectemos de la gente porque estamos mirando todo el tiempo la pantalla de nuestros teléfonos celulares. Cuando compro algún producto nuevo, por ejemplo unos auriculares bluetooth que sirven para nadar, estoy como dos horas con el aparatito y me gusta compartir eso con la gente. Aunque a mi esposa mucho no le gusta… es el momento en el que cierra la puerta y me deja solo (risas).

Periodista/Redactora en Cine y más...